África, entre crisis y auge

Conflicto y sufrimiento, crecimiento económico y auge. El continente africano se aborda hoy con frecuencia desde estos dos discursos aparentemente opuestos. ¿Cómo percibe la COSUDE estas dos perspectivas y cuál es su respuesta? Las oficinas de cooperación en Benín, la República Democrática del Congo (RDC) y Zimbabue han dado sus puntos de vista sobre las oportunidades y los desafíos que plantean estos discursos.

Automóviles y motocicletas circulan por una carretera de Benín. Junto a la carretera se han construido asentamientos informales de viviendas.

En Benín, y en África en general, el desarrollo económico ha conllevado una rápida urbanización. © COSUDE

En abril de 2023, hubo un estallido de enfrentamientos en Sudán. Desde entonces, la violencia a gran escala se ha apoderado del país. El conflicto ha desencadenado una ola migratoria sin precedentes —ocho millones de personas— en el interior de Sudán y los países adyacentes. Los refugiados siguen encontrando cobijo en campamentos temporales que ofrecen pocas perspectivas de una vida mejor.

En abril de 2024, Johannesburgo acogió una cumbre que reunió a prometedoras ‘startups’ tecnológicas africanas y las puso en contacto con proveedores de capital de todo el mundo para debatir sobre el panorama de las empresas emergentes en África. El Grupo del Banco Africano de Desarrollo prevé que 11 de las 20 economías de mayor crecimiento en 2024 se concentren en África.

Conflicto y sufrimiento, crecimiento económico y auge. Estos dos discursos aparentemente opuestos describen con exactitud los debates actuales en torno a África. Este artículo reflexiona sobre estos planteamientos y sobre cómo la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE) responde a estos enfoques.

Un hombre vestido con un mono azul camina por una calle en la que hay varios charcos. Diversos vehículos están estacionados al azar a un lado de la carretera en la que no hay gran cosa más.
Tanzania (donde se ha tomado la fotografía) está viviendo un período prolongado de crecimiento económico. No obstante, este auge no beneficia a toda la población. © COSUDE

¿Crisis o crecimiento?

El continente se ve afectado por diversos conflictos violentos que se caracterizan por la perpetración de ataques a civiles y la falta de rendición de cuentas por parte de los actores armados. Al mismo tiempo, los peligros relacionados con el cambio climático tienen cada vez más repercusiones en los sistemas alimentarios. Millones de personas, incluidos muchos niños, corren el riesgo de sufrir fenómenos meteorológicos extremos, como sequías y lluvias torrenciales. Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), los choques climáticos exacerban los conflictos y la violencia, factores causantes de los desplazamientos. El destino de estos refugiados contrasta con los optimistas planes de desarrollo ideados por los dirigentes africanos.

Si bien a menudo los planes de desarrollo se quedan cortos, en los últimos veinte años los países africanos han logrado un fuerte crecimiento económico y se han vuelto más asertivos desde el punto de vista geopolítico. Entre los factores que se suelen enumerar como determinantes en el discurso sobre el auge de África, figuran la democratización tras la Guerra Fría, el crecimiento económico, un mayor papel en el comercio mundial, la innovación tecnológica y una nueva generación de líderes en el continente africano.

¿Qué está haciendo la cooperación internacional suiza?

La estrategia para el África subsahariana 2021-2024 del DFAE reconoce el desarrollo económico del continente mencionando los países que han demostrado un crecimiento sostenido: Senegal, Costa de Marfil, Ghana, Nigeria, Angola, Sudáfrica, Ruanda, Kenia y Etiopía. Sus políticas económicas, que apoyan el desarrollo del sector privado, se consideran posibles vectores de desarrollo a escala continental. Como motores económicos de África, han creado dinámicos entornos de inversión vinculados a florecientes ecosistemas de ‘startups’.

La COSUDE trabaja activamente en dieciocho países del África subsahariana entre los que figuran países económicamente emergentes (por ejemplo, Ruanda, Tanzania y Benín) y países con entornos más difíciles o de crisis (por ejemplo, la región del Sahel, Sudán y Somalia). Suiza tiene el objetivo de aumentar su colaboración con los actores del sector privado, centrándose, por ejemplo, en jóvenes emprendedores cuyas ‘startups’ ofrecen el potencial de crear empleos. Paralelamente, presta especial atención a los desafíos relacionados con el desarrollo humano, como por ejemplo la falta de acceso a los servicios básicos (salud, educación, agua y energía).

En un discurso pronunciado con motivo de la edición de este año del Día de África (el 25 de mayo), la directora general de la COSUDE, Patricia Danzi, reiteró las prioridades de la cooperación internacional de Suiza: paz y gobernanza, clima y medio ambiente, desarrollo humano y desarrollo económico sostenible. Cada una de estas prioridades es muy pertinente para África. Además, puso de relieve el compromiso constante de Suiza con la localización.

Dos mujeres de pie en un campo. La mujer situada a la derecha sostiene un teléfono móvil con la mano izquierda. Las dos miran el teléfono.
Dos mujeres kenianas utilizan la aplicación Shamba Pride, una plataforma para vender productos agrícolas que permite eliminar la necesidad de intermediarios y abarata los costos de la agricultura. © Shamba Pride

Experiencias en Benín, la RDC y Zimbabue

Elisabeth Pitteloud, jefa de la cooperación suiza en Benín, piensa que ha habido un "impulso del nuevo Gobierno para cambiar la imagen de Benín y convertirlo en un país moderno y dinámico". Esta imagen de modernidad se ve cuestionada por la falta de acceso a los servicios básicos y las crecientes desigualdades regionales. La cooperación bilateral de Suiza equilibra su ayuda al país prestando apoyo a los planes gubernamentales de desarrollo en las prósperas regiones costeras, por una parte, y centrándose, por otra, en el suministro de servicios básicos en las zonas más pobres del norte.

Ha habido un impulso del nuevo Gobierno para cambiar la imagen de Benín y convertirlo en un país moderno y dinámico.
Elisabeth Pitteloud, jefa de cooperación en Benín

El crecimiento económico en la República Democrática del Congo (RDC), basado principalmente en el sector minero, no está logrando un desarrollo equilibrado, sino que está dando lugar a altos índices de pobreza y acusadas desigualdades sociales. Suiza centra su apoyo en el este del país, una región afectada por conflictos prolongados y recurrentes que tienen consecuencias humanitarias devastadoras. Suiza prioriza las necesidades más urgentes, en consonancia con los planes gubernamentales de desarrollo y la respuesta humanitaria. Según Denise Lüthi, jefa de cooperación en la RDC, "la gran ventaja de Suiza es su proximidad con la población y su capacidad de adaptación a los contextos locales". El hecho de trabajar con las organizaciones nacionales aporta legitimidad a los programas suizos.

En Zimbabue, la colaboración con el sector privado es un aspecto esencial de las intervenciones de la COSUDE, a pesar del notorio predominio de los discursos de crisis. Para Stefano Berti, jefe de la cooperación en Zimbabue, "los discursos de crisis limitan nuestras perspectivas sobre lo que es posible e imaginable en términos de desarrollo". La colaboración con el sector privado ha sido motivo de optimismo y una manera de superar estas perspectivas limitantes: el apoyo de la COSUDE al Fondo Fiduciario de la Asociación para la Energía y el Medio Ambiente (EEP, por sus siglas en inglés) es un ejemplo clave. Mediante el proyecto, Suiza proporciona subvenciones iniciales a actores privados cuyas tecnologías y proyectos innovadores de energías limpias crean empleo al tiempo que contribuyen a mitigar el cambio climático.

La gran ventaja de Suiza es su proximidad con la población y su capacidad de adaptación a los contextos locales.
Denise Lüthi, jefa de cooperación en la República Democrática del Congo

Lecciones para el futuro

El éxito de colaborar con el sector privado y la sociedad civil intensifica los esfuerzos de la COSUDE de mejorar continuamente su cooperación con los actores nacionales. Ello permite aprovechar el potencial de los jóvenes de África y el espíritu emprendedor para promover el desarrollo, también para los más pobres.

La COSUDE hace hincapié en que la cooperación internacional en África debe tener en cuenta las dinámicas de crecimiento y crisis en los contextos locales donde trabaja a fin de responder adecuadamente a las diversas realidades que vive el continente.

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